
Día 1: Explorando Edimburgo
Comenzamos nuestro primer día en Edimburgo con la emoción de descubrir todo lo que la ciudad tiene para ofrecer. Decidimos recorrer a pie sus calles, dejándonos llevar por su encanto y por la vibrante atmósfera que la caracteriza. A continuación, os compartimos los lugares más destacados que visitamos en este día.
📍Pasear por las calles de Edimburgo
Desde el momento en que llegamos a la ciudad, la emoción nos invadía y no pudimos evitar salir a recorrer sus calles desde el primer momento. Paseamos sin prisa, dejándonos sorprender por el encanto de la ciudad, con su arquitectura y su ambiente vibrante. Mientras nos perdíamos entre sus callejuelas, el imponente Castillo de Edimburgo dominaba el horizonte, captando toda nuestra atención. Aunque no visitamos su interior ese día, lo teníamos planificado para más adelante, pero no podíamos dejar de admirarlo desde el exterior. Como grandes apasionados de los castillos, estábamos ansiosos por descubrir cada rincón de esta fortaleza cargada de historia.

Todo dependerá del tiempo del que dispongáis, pero cuando visitamos ciudades pequeñas, nos gusta dedicar el primer día a pasear y empaparnos del ambiente del lugar. En esta ocasión, este plan nos pareció perfecto, ya que nuestro vuelo desde Madrid salió a las 6:30 am y llegamos a Edimburgo bastante cansados. Optamos por un recorrido tranquilo, explorando lugares céntricos y fáciles de recorrer a pie.
📍Catedral de St Giles
Desde el Castillo de Edimburgo, caminamos apenas cinco minutos hasta la majestuosa Catedral de St Giles. Aunque oficialmente no tiene el título de catedral, al no contar con obispado, está considerada el principal centro religioso de la ciudad. Su nombre rinde homenaje a San Gil, patrón de Edimburgo y protector de los enfermos y leprosos.
Nos cautivó su impresionante arquitectura, moldeada a lo largo de los siglos a través de múltiples remodelaciones. Aunque no es un templo de grandes dimensiones, su interior nos dejó sin palabras con sus magníficas vidrieras de colores, que llenan el espacio de una luz mágica. La entrada es gratuita, aunque si queréis tomar fotos en su interior, es necesario abonar 2 libras.

📍Museo Nacional de Escocia
Nuestra siguiente parada fue el Museo Nacional de Escocia, una visita que nos sorprendió gratamente. La entrada es gratuita, y su interior alberga una increíble variedad de exposiciones distribuidas en varias plantas, cada una organizada por temáticas.
Recorrer el museo fue un viaje fascinante a través de la historia, la ciencia y la naturaleza, desde los orígenes de Escocia hasta la actualidad. Entre todas las secciones, nuestras favoritas fueron las dedicadas a la ciencia y los animales. Nos maravillamos con los restos de meteoritos y tuvimos la oportunidad de ver a la famosa oveja Dolly disecada, un auténtico icono de la historia de la clonación.
Si os gusta descubrir curiosidades y aprender de una forma entretenida, os recomendamos incluir este museo en vuestro itinerario. Explorar sus salas es una experiencia enriquecedora, que permite sumergirse en la historia de Escocia mientras se disfruta de un rato agradable.


📍La emotiva historia de Greyfriars Bobby
Justo a la salida del Museo Nacional de Escocia, nos encontramos con la Estatua de Greyfriars Bobby, un homenaje a una de las historias más conmovedoras de Edimburgo.
Bobby, un perro de raza Skye Terrier, fue el fiel compañero de John Gray, un policía que falleció de tuberculosis en 1858. Su lealtad fue tan grande que, tras la muerte de su dueño, Bobby pasó el resto de sus días junto a su tumba en el Cementerio de Greyfriars, permaneciendo allí durante 14 años hasta su propia muerte.
En nuestra visita al cementerio, pudimos ver su tumba, adornada con pequeñas ofrendas de quienes aún recuerdan su conmovedora historia de amor y fidelidad eterna. Sin duda, una parada imprescindible para conocer una de las leyendas más entrañables de la ciudad.

📍El misterioso Cementerio de Greyfriars
El Cementerio de Greyfriars no solo es conocido por su historia conmovedora, sino también por su lado más oscuro y misterioso. Una de las leyendas más inquietantes que rodean este lugar tiene como protagonista al espíritu de George Mackenzie, un abogado apodado «el sanguinario». Durante su tiempo en el poder, los prisioneros que metió en la cárcel fallecieron debido a las torturas o las malas condiciones en las que se encontraban.
La leyenda cuenta que el espíritu de Mackenzie aún ronda el cementerio, causando extraños sucesos y perturbando a aquellos que se acercan a su mausoleo. Nosotros, siendo precavidos, decidimos no acercarnos demasiado a su tumba, pero sin duda este es un lugar interesante para los amantes de las historias misteriosas.
Mientras paseábamos por el Cementerio de Greyfriars, nos llamó la atención el imponente George Heriot’s School, un prestigioso colegio que, con sus enormes dimensiones y arquitectura de cuento, nos recordó a un castillo.
Nos sorprendió ver el cementerio, un lugar generalmente solemne, tan concurrido. Era curioso ver grupos de personas sentadas, charlando y disfrutando del ambiente.


📍Elephant House y su conexión con Harry Potter
Si sois seguidores de la saga de Harry Potter, Elephant House es un lugar muy especial. Aunque no entramos a tomar nada, no pudimos resistir la tentación de hacer una foto desde su exterior, donde había muchos aficionados disfrutando del ambiente. Sin duda, es una parada imprescindible para quienes quieren sentir un pedazo de la magia de J.K. Rowling en Edimburgo.

📍Última parada en el Castillo de Edimburgo
Después de un día explorando la ciudad, dimos un agradable paseo de regreso al hotel. En el camino, decidimos hacer una última parada en el impresionante Castillo de Edimburgo para verlo iluminado por la noche. La vista era espectacular, con las luces resaltando su imponente arquitectura y creando una atmósfera mágica.

Antes de regresar al hotel, pasamos por un supermercado cercano y compramos unos sándwiches para cenar. Ya en el hotel, nos relajamos y disfrutamos de una cena tranquila, descansando para comenzar el día siguiente con energías renovadas, listos para descubrir Stirling y, por la tarde, continuar con los lugares pendientes de Edimburgo.
Esperamos que os haya gustado conocer cómo fue nuestro primer día en Edimburgo. Si queréis seguir descubriendo más sobre nuestro viaje y las maravillas que Escocia tiene para ofrecer, no os perdáis el resto del itinerario. ¡Hay mucho más por contar!